Los milagros existen

Emocionante, dramático, agónico, hazañoso...todas estas palabras quedan chicas, pero en parte resumen lo que fue el final del partido contra Brown de Adrogué ayer. Un triunfo increíble, con un resultado cambiante y situaciones de gol durante los 90 minutos, un espectáculo que será difícil de olvidar, que vuelve a dejar en claro que cuando los dos equipos quieren proponer y arriesgan se pueden ver esta clase de partidos. Un triunfo que no sólo sirve para sumar 3 puntos, sino para ganar una enormidad en confianza de cara a estas 2 finales que quedan en nuestra interminable ilusión por entrar al cuadrangular. Pero después de lo de ayer, todo es posible...

Había empezado mal el partido para el bohemio, ya que dos desconcentraciones le permitieron a Brown ponerse 2 goles arriba antes de los 30 minutos de la primera etapa. Parecía que era imposible recuperarse de un golpe así, sobre todo por lo poco que hacía Atlanta en la cancha para cambiar el trámite. Con la defensa desconcentrada y con Quiroga y González discutiendo entre ellos antes de preocuparse por jugar. Sin embargo a los 35 minutos Acosta Cabrera, el siempre resistido Acosta Cabrera, la peleó como un toro y Soriano terminó de empujarla de cabeza para devolverle un poco de ilusión a los pocos bohemios presentes en Adrogué. Así se fue el primer tiempo, con un 2 a 1 que todavía dejaba una pequeña luz de esperanza...

Para la segunda parte, se notaba desde el vamos que Atlanta tenía la decisión y la convicción de empatar el partido, y sólo tardó 7 minutos en conseguirlo, cuando un cabezazo del incansable Soriano (tras un gran centro de Arancibia) nos ponía nuevamente de pie. Era heroíco ya a esa altura lo de Atlanta, pero la realidad indicaba que un empate no alcanzaba, había que ir por más.

Alonso apostó por el ingreso de Acuña en lugar de Guzman, y el Chichi se paró como volante por la derecha, otro lugar que claramente no le beneficia para desplegar su juego, ya que el ida y vuelta se le hacía imposible. Si la idea era reemplazar a Guzman por otro jugador para cumplir la misma función el ingresado tendría que haber sido Lolli. Minutos más tarde, ingresó Galeano por Quiroga (nuevamente muy errático) e invirtió su punta con Acuña, pasando este a jugar como volante por la izquierda. Atlanta con esos cambios perdió más de lo que ganó, y Brown volvió a tomar la iniciativa liderado por su muy buen volante izquierdo Jacobo Mansilla, que se cansó de atacar en soledad por su punta. Sabiendo que el punto no servía Atlanta también arriesgaba y quedaba muy expuesto, y allí se empezó a ver lo mejor del partido, con situaciones de gol en forma permanente, con un par de atajadas consagratorias de Llinás incluídas.

Llegando a los 45 minutos del segundo tiempo y con el resultado 2 a 2, Llinás fue a cabecear un córner buscando el gol que le falta para recibirse de héroe. Cuando volvía desesperadamente al arco bohemio, sintió un pinchazo que prácticamente lo paralizó. Brown se aprovechó de la situación y en la jugada siguiente (minuto 46) un remate de Fariña se transformó en el 3 a 2 para el local. Parecía que las ilusiones bohemias quedaban totalmente sepultadas y de la peor manera.

Pero un minuto más tarde, nuevamente apareció en escena el "Pollo" Soriano, para decretar el 3 a 3 que ya silenciaba a la parcialidad local. Un empate agónico del bohemio, pero que seguía sin servir. Quedaban sólo 2 minutos de los 4 adicionados por el impresentable Mario Prieto y había que jugarse todo y con Llinás lesionado. Una más nos tenía que quedar...

Brown se lo volvió a perder, y arrancó la contra bohemia, con mucho terreno libre se fue Juani Acosta Cabrera (luchó y peleó cada pelota todo el partido), se llevó la pelota varios metros y se la dejó servida a Acuña en el centro del área, el juvenil no dudó y definió de primera ante la salida de Bangert para desatar la locura total de la gente de Atlanta presente en el estadio, un festejo interminable con todo el banco de Atlanta ingresando a la cancha, una verdadera hazaña se estaba consumando...

Llegó el último centro para Brown y el cabezazo se fue besando el poste derecho de Llinás, Prieto que marca el final y todos los jugadores abrazados con el arquero de Atlanta, esa es la imagen que queda de una tarde increíble por donde se la mire, donde Atlanta estuvo a la altura de los hechos porque como decimos siempre hay formas y formas de perder, con la actitud de hoy se puede perder, pero el reconocimiento va a estar, gracias por dejar todo y por mantener encendida la luz de esperanza en el hincha...


LA PALABRA DEL ENORME RODRIGO LLINÁS

Nada de nada

Atlanta igualó 0 a 0 con Flandria y volvió a dejar pasar una nueva oportunidad para depender de sí mismo en la lucha por ingresar al cuadrangular. A esta altura queda a las claras que a este equipo le falta madurez y no parece estar preparado para pelear por un ascenso, ya sea por inexperiencia en la mayoría de sus jugadores como por lo corto que es el plantel, ya que cuando hay bajas se sienten y mucho.

El partido en sí no ofreció demasiado, un Atlanta que tuvo la actitud que veníamos reclamando en partidos anteriores, pero que tuvo una falta de ideas alarmante para poner en riesgo el arco de la visita, además de jugar permanentemente muy atrasado en la cancha.
El dominio de la pelota comenzó siendo del bohemio, que iba como podía pero todos los intentos se diluían cuando se llegaba a 3/4 del campo de juego, cuando Acosta Cabrera o Acuña se encontraban solos para poder terminar bien las jugadas. Flandria por su parte mostraba desde el comienzo que el punto no le caía mal, y esperaba alguna chance de contra para lastimar. Del primer tiempo queda para rescatar un cabezazo de Acuña que se fue cerca del palo derecho del arco defendido por Horacio Ramírez.

En la segunda parte, a la falta de ideas se le sumó la desesperación de saber que los minutos pasaban y se estaba dejando pasar otra gran chance. Alonso apostó por los ingresos de Soriano y González, sacando a Lolli y a Quiroga (de muy floja actuación) y retrasando a Acuña como volante izquierdo, una posición que no siente y en la que pierde más de lo que gana. Pero la historia no cambió, es más, Flandria se aprovechó del desgaste que había hecho Atlanta hasta ahí y se animó a ir por más, y tuvo más de una chance para abrir el marcador.

Así se fue el partido, un empate que es una derrota en nuestras aspiraciones por entrar al reducido, pero que nos vuelve a mostrar que este equipo no está preparado para dar ese salto que venimos esperando hace varios partidos y no se nos da nunca.

Un párrafo aparte para el muy mal estado del campo de juego, que conspira contra toda intención de jugar al fútbol. Se entiende que los problemas económicos están a la orden del día, pero de que sirve tener un plantel con buenos jugadores, de buen pie, si el césped muestra un estado paupérrimo que hace imposible dar 3 pases seguidos. Sin dudas sos cosas a las que hay que tratar de buscarle un solución, y con esto no decimos gastar dinero que no abunda sino pensar variantes para tratar de mantener el campo de juego en un estado mínimamente aceptable.


LA PALABRA DE LOS PROTAGONISTAS

Todavía cantamos

Atlanta derrotó por 1 a 0 al Deportivo Armenio en Ingeniero Maschwitz con gol de Acosta Cabrera y se mantiene expectante para poder entrar al reducido.
Con muchos jugadores en puestos improvisados y varias bajas, el bohemio salió a dar batalla y se llevó 3 puntos de oro para seguir soñando con entrar en el cuadrangular.
Hoy Atlanta se encuentra a 4 puntos del último equipo que ingresa al reducido, que es Colegiales, y que será rival de Atlanta en la penúltima fecha en Villa Crespo. Los dos equipos que tiene por encima en los puestos 6º y 7º son Temperley y Estudiantes, pero ambos tienen un partido más jugado y de ganar ese partido Atlanta los superaría.
En definitiva y más alla de cualquier especulación, hay que salir a jugarse el todo por el todo en estos cuatro partidos, que serán cuatro finales y no se puede regalar nada.

Vuelta al triunfo

Atlanta derrotó por 3 a 1 a Nueva Chicago como local, e increíblemente la paridad del torneo le sigue otorgando chances de entrar en el reducido por la promoción. Los goles fueron convertidos por Guzmán, Izquierdoz y Alvarez para dar vuelta un resultado que había comenzado siendo adverso con el primer tanto marcado por Domenez para los de Mataderos. Será vital mantener la actitud y el protagonismo que logró imponer hoy Atlanta en los 5 partidos restantes para seguir con la esperanza hasta el final.

El partido no había comenzado bien para Atlanta, era otra vez el rival el que proponía más y que parecía estar decidido a llevarse los 3 puntos para Mataderos. Izquierdoz y Cherro (a los pocos minutos saldría lesionado) eran constantemente superados por sus respectivas puntas y el gol de Chicago estaba al caer. Hasta que cayó a los 23 minutos, con un ingreso franco por la izquierda de Dómenez, que eludió la salida en falso de Llinás y definió con el arco vacío para adelantar al torito.

Parecía que la historia vivida el sábado pasado en Agronomía se iba a repetir esta vez en Villa Crespo. Con una defensa insegura, un mediocampo en el que Rutili no hacia pie y con un González errático, la lluvia de la tarde parecía presagiar un oscuro futuro en el partido para el bohemio.
Sin embargo, y a falta de fútbol, con más ganas el equipo comenzó a empujar a Chicago contra su arco, y las ganas pudieron más. Primero Gómez se lo tapó a Segovia dentro del área, y minutos más tarde el arquero de Chicago cometió un grosero error (con ayuda del terreno mojado) cuando ante un cabezazo débil la pelota se le escapó y le permitió a Guzman igualar las acciones.
Cuando daba la sensación que el primer tiempo se iba con el empate, llegó el segundo gol de Atlanta. Tras una buena jugada, Izquierdoz con un cabezazo puso el 2 a 1 para llegar más tranquilos al descanso.

Para la segunda mitad, desde el inicio de la etapa Atlanta parecía estar mejor parado que su rival, y eso volvió a evidenciarse en el marcador a los 8 minutos, cuando Leandro Alvarez (otra vez de gran partido) recibió un pase de Soriano y sacó un tremendo remate antes de entrar al área para decretar el 3 a 1.
Parecía que el partido estaba definido, pero el estado de la cancha sumado a algunas desconcentraciones que a veces tiene este equipo todavía mantenían la cautela del público bohemio. Alonso se inclinó por los ingresos de Palisi y Silva para cerrar el partido, y asi fue. Chicago casi ni inquietó a Llinás hasta que Barraza marcó el final de un partido que sirve para seguir creyendo que con actitud este equipo puede, es hora de lograr la madurez como equipo y tomarse estos 5 partidos como verdaderas finales, que van a requerir concentración durante los 90 minutos.


La palabra de los protagonistas

Un paso atras

Atlanta perdió con San Telmo por 2 a 1 en un partido en el que el Candombero fue claramente superior en el primer tiempo y luego supo defender el resultado.

Con Izquierdoz infiltrado y en un nivel sorprendentemente bajo, un riesgo que decidió tomar el cuerpo técnico, el Bohemio regaló un hueco en el costado izquierdo de la defensa y, a espaldas de Segovia, San Telmo armó su propio juego. Iban apenas 6 minutos de juego cuando Vacaaría aprovechó un desborde por ese lado y abrió el marcador.

Cualquier plan de juego que Alonso haya tenido preparado para el partido pasó al olvido al estar en desventaja desde tan temprano. Durante el resto del primer tiempo se repartieron las chances, pero por la banda derecha el local encontró un acceso rápido y fácil al area bohemia convirtiéndose en el mas peligroso de los dos. Cuando la primera mitad llegaba a su fin, una vez mas Izquierdoz llego a destiempo a un cruce y le cometió falta dentro del area a Gustavo Sever. Este batió a Llinás desde los doce pasos y al descanso 0-2.

De entrada en el segundo tiempo ingresaron el Mágico González y Martino en lugar de Segovia y Castro. Alonso mando a Acuña a jugar de volante por izquierda y así expuso aun más a Izquierdoz en su peor partido con la camiseta de Atlanta.

El segundo tiempo fue lo que todos nos imaginábamos, Atlanta tratando de llevarse puesto al rival y San Telmo buscando liquidar de contra. Ninguna dio resultado; Atlanta apenas pudo descontar gracias a un remate de Martino que luego de dar en el travesaño Gambandé empujo con la espalda al gol. Y del otro lado San Telmo llego en reiteradas oportunidades pero la falta de definición lo obligó a sufrir hasta el final.


Si bien matemáticamente hay chances, el bohemio tiene demasiados equipos entre la 5º posición (ultima que entrega un lugar en el reducido) y la 12º que ocupa, aunque hay que destacar que la irregularidad del torneo nos mantiene a 6 puntos con un partido menos.

El martes desde las 15hs el bohemio recibirá a Nueva Chicago, justo uno de los equipos q tiene por encima y, de no ganar, se despedirá definitivamente de la lucha por jugar la promoción.

Un poco de oxígeno para seguir con vida

Con goles de Carlos Izquierdoz y Oscar "Chichi" Acuña, Atlanta venció como local a Defensores de Belgrano por 2 a 0, y cambió la pálida imagen que había dejado el martes pasado frente a Villa San Carlos. Aunque sigue lejos del Cuadrangular, las chances matemáticas nos mantienen en la pelea.

El Bohemio ganó el partido sin pasar sobresaltos por dos razones sencillas: empezó jugando claramente mejor que el rival, se encontró rápido en ventaja, y además, un flojo Defensores no se propuso atacar hasta el final del encuentro, donde tuvo algunas chances para marcar el descuento.

Lo cierto es que con el lindo cabezazo de Izquierdoz (Lanús: te estamos eternamente agradecidos), el equipo de Alonso ya ganaba a los 12 minutos, y Álvarez (qué lástima conocerlo recién ahora) manejaba los hilos del mediocampo bohemio y trataba de asociarse con los otros pibes: Galeano, Castro y Acuña, todos de buen partido.


La joya del partido, fue, sin lugar a dudas, el golazo que convirtió el "Chichi" Oscar Acuña, de 20 años, en su debut en el León Kolbowsky. Con sólo dos partidos en Primera (había debutado la semana pasada frente a Los Andes), el chiquito juvenil de Atlanta, atrevido, encarador, agarró la pelota en la mitad de la cancha tras una buena combinación con Galeano, comenzó a cerrarse, y con un fuerte zurdazo por arriba del arquero Sanzotti, convirtió un tremendo gol que selló el 2 a 0 en favor de Atlanta.

Si hay algo para criticar de este triunfo, es quizás, lo protagonizado en la segunda parte. El bohemio volvió a jugar nuevamente muy cerca del arco de Llinás, y si Defensores no encontró el descuento, fue porque no lo buscó con ímpetu, y también por un poco de fortuna.

El final del campeonato está cada vez más cerca, restan sólo siete fechas, y si Atlanta aún tiene chances de entrar al Reducido es por la irregularidad del torneo. Como sea, si queremos pelear por una Promoción deberemos tener una racha importante de victorias, como las cinco consecutivas de la primera rueda, que empezó con San Telmo, justamente, el rival de la semana que viene.



LA PALABRA DE LOS PROTAGONISTAS: