En una tarde que no fue tan fría como anticipaba el pronóstico el bohemio sufrió haciendo figura a Llinás pero también pudo haberse quedado con los 3 puntos en un encuentro cambiante que finalizo empatado 0 a 0.
Si bien a nivel general y con el apoyo de su gente Atlético Tucumán fue superior al bohemio, el equipo de Javier Alonso jamás se colgó del travesaño. En los primeros minutos Atlanta quiso adueñarse de la pelota y, a excepción de la primera jugada en donde Segovia le cometió penal a Martínez que por suerte el árbitro Trucco paso por alto, tuvo el control del juego durante los 10 minutos iniciales.
Al ver el planteo de la visita, Atlético aprovecho para ganar las espaldas de los laterales ya que la falsa línea de 4 bohemia no cerraba correctamente. Ahí se hizo fuerte Cesar Montiglio ya que Lugo no volvía y Segovia no se terminaba corriendo al lateral. Así el 8 del Decano se hizo un festín de desbordes que recién sería corregido en la segunda mitad. Lo mismo pasó en el hueco que dejaba Pajón, aprovechado una y otra vez por el zurdo Néstor Espínola.
Del bohemio poco y nada. Aparicio poco pudo hacer ya que no se terminaba de convertir en el enganche creador que Atlanta necesitaba ni en el 8 que recorra el lateral. La más clara la tuvo Bielkiewicz en una que peleo contra dos defensores y que se fue desviado cuando definió antes el achique de Ischuk.
En la segunda parte Atlanta entendió lo que había que hacer y se tiro unos metros más atrás para no sufrir con las subidas de los carrileros que ganaban las espaldas de Pajón y Lugo. Atlético volvió a arrancar mejor pero poco a poco fue cayendo en la desesperación. Pajón quedo como 4 definido y casi no lo pasaron. Solo una vez pudo el Pulga Rodríguez y el travesaño le dijo que no en la más peligrosa de la tarde. Del otro lado Segovia se acomodó de lateral izquierdo y los desbordes de Espínola y Montiglio prácticamente desaparecieron.
En el medio Lorefice parecía el Pogonza de la temporada pasada, recuperaba todo lo que le pasaba cerca y se la entregaba siempre a un compañero. Los últimos 20 minutos, con Guzmán y Abel en cancha le dieron otra dinámica al equipo de Alonso. Sumado a eso la salida de Iuvalé el 5 del equipo local, le permitieron a Atlanta adueñarse de las pelotas divididas en la mitad de la cancha y crear algunas situaciones de peligro. La más clara fue tras un robo de Guzmán sobre la salida de Deivis Barone que le quedo incomoda para patear y cuando la pasó atrás Andrés se trabó pisando la pelota y perdiendo ante la marca.
El Bohemio se trajo de Tucumán un punto que si bien suena a poco cuando vemos que solo cosecha 2 puntos en 2 partidos, también muestra lo dura que es la categoría y que Atlanta le puede jugar de igual a igual a cualquiera. Sin olvidarnos que es el primer viaje al interior (más allá de Rosario) en 15 años y que por primera vez se consiguió sumar puntos ante Atlético Tucumán (había ganado los 7 enfrentamientos anteriores).
Sera cuestión de hacerse fuerte la próxima fecha ante Central en Villa Crespo para darle la primer alegría a la gente y empezar a mirar la parte alta de la tabla para no sufrir con los promedios.
Después del encuentro tuvimos la posibilidad de conversar con Javier Alonso y Guido Milán, que hizo su debut en el bohemio.
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