Atlanta volvió a la victoria derrotando a Temperley por 2 a 0 en Villa Crespo. Los goles bohemios fueron convertidos por Baéz en contra y Lucas Mancinelli. Los jugadores dieron la merecida vuelta olímpica ante su gente antes y después del partido.
Con la única responsabilidad de demostrarle a su gente que no estaba relajado, el equipo bohemio jugó por momentos al nivel que lo llevo a la consagración, con Mancinelli como arma letal, y se quedo merecidamente con los 3 puntos.
Temperley desperdició las pocas chances que creó, exigiendo a Llinás una sola vez en toda la tarde y Atlanta encontró la ventaja gracias a un desvío en la cabeza de Baez de un centro de Mancinelli que se transformó en el primer gol del partido. Cada vez que el 8 bohemio recibía la pelota en posición de ataque, automáticamente toda la platea se paraba como suponiendo que esto derivaba en una situación de peligro. Con Lolli de 4, Lucas prescindió de la responsabilidad de la marca y a los 40 minutos de la primera mitad recibió en el área y con una gran definición marco el 2-0 que sería definitivo.
El segundo tiempo fue control de pelota y desperdicio de algunas chances que hubiesen aumentado el marcador, para finalmente terminar festejando frente a la popular primero y de cara a la platea después.
Una ronda similar a la del día del "4 meses de tu vida para conseguir algo importante" coronó los festejos con la gente.
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